El Deportivo vence 2 a 1 al Oviedo en el Trofeo Enma Cuervo

 Lo decía uno de los expresidentes del Dépor, con más retranca que solemnidad: “Lo mejor del fútbol es la pretemporada”. Y razón no le faltaba. Porque este Dépor que cincela Hidalgo, aún en fase de amasado, ya empieza a tener hechuras de equipo rocoso y con chispas. El Trofeo Emma Cuervo, el clásico de Ribadeo, se vino de vuelta a Koruña después de una victoria de las que saben bien: por rival, por remontada, y por sensaciones. Once veces lo ha ganado ya el Dépor. Un vicio esto de llevarse copas veraniegas.

El Pepe Barrera lucía repleto y encendido. Mucha camiseta azul (de las del Oviedo) y también un nutrido puñado de deportivistas, con más fe que el Apóstol Santiago predicando en España y más ganas que un niño en los columpios. El Dépor salió más enchufado que un hervidor británico: presionando arriba, robando balones, y con un Yeremay que parece que le da al play cuando quiere que pasen cosas. El Oviedo, mientras, miraba y recogía, como quien entra tarde a la verbena.

Gragera llegó a marcar en una falta lateral, pero el linier se hizo el interesante y alzó el banderín. Luego, una cuchara loca de Yeremay desde el medio del campo a punto estuvo de colarse por la escuadra. Por momentos, el Dépor era un vendaval de ideas con traje de faena. Pero el Oviedo, como buen equipo de Primera, empezó a recomponerse y empujar. Sufrimos un rato, y justo al poco de volver del descanso nos clavaron el 0-1 en un despiste defensivo. El gol fue de Viñas, recogiendo un balón al poste que parecía condenado al limbo.

Pero si algo tiene este Dépor es que no se le cae el alma tan fácil. Patiño, el inglés de sangre koruñesa, robó una pelota tras una posible  falta a Cazorla, y de ese lío nació el empate. Chacón puso un centro con más fe que pausa, Eddahchouri cabeceó con ganas y Moldovan la sacó… o no. El linier esta vez bajó el martillo: gol.

Y tres minutos después, otro lío en la salida del Oviedo, recuperación de Mario Soriano, pase a Patiño, y gol del inglés. Un 2-1 de esos que hacen saltar de la silla aunque sea agosto. El chico, que ha ganado músculo y minutos, se sacó la espina de su primer tanto con la blanquiazul.

A partir de ahí, el partido se fue embarrando. Cambios, choques, calentones... El Oviedo empujó, pero sin clarividencia. El Dépor, con medio Fabril en la zaga, se mantuvo firme y todavía tuvo una para cerrar el partido, pero Moldovan evitó el tercero de Herrera.

Se acabó el trofeo con buenas sensaciones: Gragera y Villares mostraron química en la medular, Yeremay puso la magia, y Patiño sumó galones. Esto aún no ha empezado, pero en Koruña la ilusión ya corre por las aceras. Nos vemos el 16 en Granada, que ahí empieza lo serio. Pero que nos quiten lo rabuñao.

Deportivo 2 - Oviedo 1

Deportivo: Germán Parreño; Loureiro (Noubi, m. 45), Samu (Pablo Garcia, m. 83), Dani Barcia (Damián Canedo, m. 78), Escudero (Quagliata, m. 45); Gragera (Patiño, m. 45), Villares (Rubén López, m. 60); Mella (Luismi Cruz, m. 45), Chacón (Mario Soriano, m. 60), Yeremay (Herrera, m. 60); y Eddahchouri (Bouldini. m. 60).

Oviedo: Aarón Escandell (Moldovan, m. 45); Nacho Vidal (Omar, m. 45), Dani Calvo (David Costas, m. 45), Luengo (Marco, m. 45), Rahim (Brandon, m. 45); Sibo (Tejón, m. 45), Reina (Cazorla, m. 45); Ilyas Chaira (Forés, m. 45), Ilic (Lucas, m. 45), Hassan (Ovi, m. 28); y Rondón (Fede Viñas, m. 45).

Goles: 0-1, m. 48, Fede Viñas; 1-1, m. 62, Eddahchouri; 2-1, m. 65, Patiño.

Árbitra: Eugenia Gil Soriano (Comité Gallego). Amonesto a Patiño y Bouldini por el Deportivo y a Ovi, Forés y Fede Viñas por el Oviedo.

Incidencias: Pepe Barrera (Ribadeo). 74 edición del Trofeo Emma Cuervo. Más de 3.000 espectadores en un campo atestado de público.