20 años del mítico penalti de Djukic

Hoy se han cumplido 20 años de aquel subcampeonato que el deportivismo vivió como el mayor drama de toda la historia del club con un penalti en el minuto 89:30... todavía hoy en día se me eriza la piel recordando aquel momento mítico para el Deportivo.

La consagración del Super Dépor
Aquel equipazo tenía sus cimientos en la anterior temporada con la contratación de dos lujazos como Mauro Silva y Bebeto al que se le había sumado descartes de grandes equipos como Aldana y Nando, con un Fran, el diamante de la cantera, que años antes había sido tentado por el Real Madrid, impidiendo Lendoiro su marcha.

Hace 20 años, en aquella temporada 93-94, todos los que recordamos con nostalgia, la añoranza de los años transcurridos, seguro que podemos decir de memoria la alineación que semana tras semana Arsenio Iglesias ponía en el terreno de juego. El Dépor mandó durante buena parte de la competición con una excelente primera vuelta pero fue perdiendo fuelle y se desinfló en los últimos tres partidos de la temporada donde no pasó del empate contra el Rayo, Lleida y finalmente el Valencia.. Los nervios, la presión o el excesivo conservadurismo de Arsenio quizás fueron las causas de que se escapara el campeonato, un sueño que tocamos con las yemas de los dedos y que fue real durante una buena parte de aquella última jornada ya que el Sevilla se adelantó en el Nou Camp dando su momentánea victoria contra el Barcelona la Liga al Dépor.

Y Gozález paró el penalti

Con el especialista en tirar penaltis,  Donato,  fuera del campo, el extractorista yugoslavo Dujkic tuvo los arrestos de coger el balón y tirar la máxima pena que López Nieto había señalado tras ser derribado Nando dentro del área. El tranquilo defensa eslavo respiró muy profundamente intentando mitigar toda la ansiedad concentrada en un momento y espacio tan infinitesimal de su vida, quizás nunca antes hubiera tenido tanta angustia. Solo valía meter aquel balón dentro de la portería porque el Barcelona ganaba su partido y el tiempo estaba cumplido. Una de las ligas más emocionantes de los últimos años iba a decidirse en aquel cara o cruz. La ejecución fue muy mala, tirando hacia la izquierda y adivinando el portero fácilmente la intención del deportivista y sin oportunidad para que Bebeto atento al remate pudiera aprovechar un posible rechace. González, el arquero valencianista, celebró su parada con gran entusiasmo, nada se jugaba su equipo. Luego se supo que cada jugador valencianista había cobrado una suculenta prima por ganar.

Años más tarde, el Dépor se vengaría del Valencia ganándole  en la final de la Copa del Rey (1995) el primera gran título conseguido y del Barcelona ya que en el año 2000 quedaría por delante de los catalanes consiguiendo el soñado título de Liga.

Esperemos que dentro de poco volvamos a vivir todos los deportivistas otro momento para recordar con el ascenso a la Primera División.