El Deportivo pierde un partido que le puede costar muy caro

No hay palabras para describir la alarmante situación de la entidad deportiva más representativa de la ciudad. El partido del domingo ha sido de lo peor que lo aficionados han visto en años, no por el resultado, si no por la incapacidad de los jugadores y,  sobre todo, del entrenador para dar al menos una impresión de que algo se puede hacer. Hubo momentos en el el equipo zozobró hasta convertirse en un conjunto sin cabeza y alma. La descomposición de los últimos meses sobre los terrenos de juego concuerda con las noticias que ahora van conociéndose de lo que pasa fuera del objetivo de las cámaras de televisión: un entrenador que cada día tiene menos autoridad; piques entre jugadores; declaraciones poco profesionales y las filtraciones interesadas a la prensa sobre el turbulento ambiente en los vestuarios.

Primera parte de impotencia

El llenazo en Riazor para apoyar al equipo en horas bajas (a petición del propio Victor Sánchez del Amo) no impidió que viésemos uno de los partidos más flojos del Dépor. A pesar de la fenomenal tarde de playa (ya no valía eso del bajón que produce la lluvía y el frío) y que solo había que poner el empate ante un rival directo,  el peor equipo hasta entonces de la segunda vuelta (ahora supongo que será el Dépor)  para acabar el domingo de fiesta con un lunes para descansar y todo... los que se ganan el jornal con este de pegarle al balón vestidos de blanquiazul volvieron a decepcionar por enésima vez, aunque como esta vez, pocas.

Salía el Dépor con su casi once de gala:
Potería: Manu
Defensa: Navarro, Sidnei, Arribas, Laure.
Centro del Campo: Fajr, Borges, Mosquera, Cartabria
Delantera: Luis Alberto y Lucas.

Alineación de los equipos

La gasolina le duró al Dépor unos 10 minutos. Luis Alberto con uno de sus disparos desde fuera del área que se fue al palo y las ganas que le ponía Cartabria daban muy buenas sensaciones. Durante los siguientes 15 minutos el Dépor siguió dominando pero moría sin acercarse al área rival. Las imprecisiones de la defensa del Getafe propiciaba robos de balón pero en ningún momento el Dépor supo aprovechar el nerviosismo inicial de los visitantes. Solo 5 disparos con el único citado antes entre los tres palos durante los primeros 25 minutos de juego.

El mejor tiro del Deportivo en todo el partido a puerta. Luis Alberto en el minuto 7 demostrando que tiene mucha calidad como rematador

El Dépor continuaba teniendo el balón pero finalizaban de manera muy débil. Un tiro lejano de Lucas en el minuto 26 y otro de Cartabria en el 28. El Getafe viendo la parsimonia de los koruñeses, se empezó a ir hacia arriba para generar las ocasiones más claras del partido. En el 30´ la imprecisión de Sarabia impidió el primer gol de los madrileños. En el minuto 34 otra clara oportunidad del Getafe que Álvaro envió fuera después de que su compañero Sarabia aprovechara un balón regalado por Mosquera.

Por entonces el Dépor ya estaba perdido y con sus líneas adelantadas. Incluso Sidnei se animaba más de la cuenta a subir. Mejor hubiera sido haber replegado velas ya que en uno de los fáciles contraataques del Getafe, Pedro León recoge pisando el área y ante la oposición de Navarro hace un recorte con la izquierda y tras avanzar unos metros chuta, con la derecha, el balón que se cuela en la portería a pesar de la oposición de Navarro y Mosquera y la estirada de Manu.

Pedro León yéndose de Navarro

Tras este mazazo, del que ya no se recuperaría el Dépor, se acabó la primera parte. 

Segunda parte, el descalabro

Tras la reanudación, a punto estuvo de sentenciar el Getafe de un saque de libre directo que la buena intervención de Manu abortó.

El Dépor lo intentó en varios ocasiones pero siempre tuvo la respuesta del portero Guaita. Cartabria fue el único que brilló en los ataques, intentando una y otra vez marcar. Probó suerte en el minuto 50 con un saque de falta que paró el portero y en una jugada individual parecida a la su gol el pasado sábado con un disparo parabólico que Guaita envió a córner.

Cartabria, el jugador del Dépor que más entero ha llegado al final de temporada. Ha sido el mejor en los dos últimos partidos

Y las luces se apagaron en el minuto 63 cuando un desaparecido Borges fue expulsado por doble tarjeta amarilla. Sin timón, sin furia para afrontar los minutos finales, sin ningún revulsivo en el banquillo a pesar de la salida de Cani y Juanfran por Fajr y Laure.

Borges a la calle

Con los herculinos arrastrándose por el campo, sin orden ni concierto, el Geta se convertía en claro dominador. En el 67 los madrileños se divertían con una jugada en las que se permitían dar un pase de tacón dentro del área con un remate a bocajarro de Scepovic al muñeco.

Manu para el tiro del serbio Scepovic

Navarro mostraba con su patada a Vigaray, la frustración de un equipo incapaz de ganar un solo partido. Se llevó la amarilla.

Cartabria lo intentó por su cuenta, cuando todos pasaban de todos, marcar con un desesperado tiro desde fuera del área que salió desviado.

Y en el 85 la estocada final del Geta. Otra vez de saque de esquina, el quinto consecutivo que le meten a Manu en una jugada que comienza en un córner. Saque de Pedro León y Vigaray toca en el primer palo muy fácil con la punta de la bota a pesar de que Arribas le cerraba el paso. Manu acompañando con su estirada, como siempre, el balón.

Hasta entonces, el público que animó a su equipo, empezó a protestar. Victor Sánchez del Amo calentó más a la grada con el inútil cambio de Oriol por Navarro en el minuto 86.

Pañolada en Riazor

Caras serias en el palco. Tino Fernández bajó al vestuario al finalizar el partido

En el tiempo de descuento, el espectáculo fue bochornoso. En las gradas la gente se marchaba a casa tras tirar a la basura dos horas de un fantástico domingo, los más acérrimos cantaban contra los del campo y la directiva, mientras que sobre el terreno de juego los futbolistas koruñeses parecían los de Fifa de la Play Station con el mando sin nadie que lo coja. En esto que llega Scepovic para poner la guinda con un 0 a 3 que no salío en el marcador por muy poco. Su disparo desde el borde del área, chocó contra el palo y luego se paseó por la línea bajo los tres palos.

Cartabria al final del encuentro

Complicación en las dos últimas jornadas

Tras la decepcionante derrota en Riazor, el Dépor está cerrando una de las peores rachas de su centenaria historia. Tan solo una victoria en 20 partidos. Los 12 puntos que llegaron a distanciarlo de los puestos de descenso son ahora 4. Sin ninguna confianza en el club, la mayor parte de los seguidores estarán más pendientes de lo que hagan los equipos candidatos al descenso: Sporting, Getafe, Granada y Rayo Vallecano.

La permanencia en la Liga BBVA se conseguirá si en las próximas jornadas se cumple:
1ª Posibilidad:
a) Derrota de uno de los dos equipos en el partido Getafe-Sporting.
b) Empate o derrota de Granada (siempre que no gane al Barcelona) o Rayo Vallecano.

2ª Posibilidad
a) Empate en el partido Getafe-Sporting
b) Empate o derrota de Granada (siempre que no gane al Barcelona) y Rayo Vallecano

3ª Posibilidad:
Jornada 37
a) Empate Getafe-Sporting
b) Ganan Granada y Rayo Vallecano
Jornada 38
c) Pierde Getafe o Sporting
d) Pierde o empata Rayo Vallecano.

Si el Dépor consigue un solo punto estaría prácticamente salvado, solo descendería en ese caso si al menos 2 equipos de los anteriores ganaran los 2 partidos que le quedan y, entre ellos, el Granada consigue al menos ganar uno y empatar el otro.

Los partidos que le quedan all Sporting son:
Getafe-Sporting
Sporting-Villarreal

Los partidos del Getafe son: 
Getafe-Sporting
Betis-Getafe

Los partidos que le quedan al Granada son:
Sevilla-Granada
Granada-Barcelona

Los partidos que le quedan al Rayo Vallecano son:
Real Sociedad-Rayo Vallecano
Rayo Vallecano-Levante

Lo que le esta sucediendo al Deportivo es inverosimil. Pocos creían que a estas alturas de la liga la situación se fuera a poner tan tensa. El equipo cae en picado en la peor etapa del campeonato donde se dan los resultados más raros. Todo puede pasar y aunque la distancia con el antepenúltimo clasificado continúa permitiendo más derrotas, es posible que los de abajo se acaben tragando esa diferencia.