100 días de la Marea Atlántica en Koruña

Más de 100 días han pasado desde que Xulio Ferreiro, junto a los chicos de la Marea Atlántica y el apoyo del PSOE y el BNG, tiene en sus manos el bastón de mando de la alcaldía. El grupo de jóvenes entusiastas de la Marea comenzó con ganas de darle una vuelta a la institución municipal y a las formas de legislar. Sin embargo, durante estos 5 meses no hay grandes cambios que reseñar, si hubiera que destacar algo sería la parálisis e incluso el retroceso respecto a sus pretensiones iniciales tras toparse bruscamente contra el duro muro de la realidad y las limitaciones impuestas especialmente por el PSOE. Poca oportunidad han tenido de mostrar sus verdaderas intenciones de cambio político.

Los deshaucios violentos continúan produciéndose a un ritmo muy parecido al del año anterior a pesar de que la Marea expuso en la campaña electoral su compromiso en la lucha contra los alzamientos a favor de las personas más humildes que perdían sus casas tras no poder afrontar el pago de la hipoteca. Tampoco se ve mucha intención de acabar con las privatizaciones de servicios públicos como el de los aparcamientos de ORA, en manos de una nueva empresa. La participación ciudadana a pesar de las buenas intenciones y frases grandilocuentes de la Marea, sigue siendo muy parecida a la de hace 5 meses, o sea, casi inexistente. Ahora suena otro de los caballos de batalla que aupó a Xulio Ferreiro a lo más alto, la renta básica. Pues bien, según el BNG lo que La Marea Atlántica pretende vender como un pequeño sueldo para los más pobres, no es más que una prestación económica ya existente a la que se le sumará una cierta cantidad. En el PP local comentan que esa ayuda fue creada en tiempos de Negreira.

Xulio Ferreiro el día de su investidura como alcalde koruñés ofreciéndole su cetro al pueblo

Por otro lado, ya han tenido sus encontronazos con la Autoridad Portuaria a la que reclaman mayores garantías en la entrega de las obras de los túneles subterráneos. Además, La Marea ha cuestionado la venta especulativa de los antiguos muelles para financiar el Puerto Exterior, lo que ha sido considerado por la Autoridad Portuaria como una amenaza que puede echar abajo todo el castillo de naipes del pago de las obras de esa infraestructura.    

Lo más positivo del nuevo alcalde es que de momento se ha cortado el flujo de dinero procedente del Ayuntamiento para dispendios de todo tipo, incluidos chanchulleos con empresas privadas como se vio en el anterior mandato. Así que quizás debamos esperar unos 4 años en los que se legisle con austeridad, sin grandes obras o festejos a cargo del presupuesto local. Parte de ese dinero servirá para ayudar a muchas familias koruñesas que viven en situaciones precarias.