En el corazón de Koruña se detuvo brevemente la noche del domingo, 9 de noviembre, cuando el emblemático Edificio del Banco Pastor encendió una espectacular iluminación conmemorativa por su centenario. La fachada de este coloso arquitectónico proyectó un gigantesco y vibrante número 100, bañando la plaza de Los Cantones en un intenso color rojo, el tono que ha caracterizado la historia de la entidad.
La celebración marca un siglo desde la inauguración oficial del edificio el 8 de noviembre de 1925 (abriendo al público al día siguiente), y sirve para recordar la huella imborrable que esta estructura ha dejado en el urbanismo y la identidad de la ciudad. Decenas de coruñeses y visitantes se congregaron para presenciar este despliegue de luz que honra un pasado pionero.
Un Hito Arquitectónico Inspirado en Chicago
Más allá de su función bancaria, el Edificio del Banco Pastor es una joya arquitectónica que en su momento rompió esquemas a nivel nacional. Diseñado por los arquitectos Antonio Tenreiro Rodríguez y Peregrín Estellés Estellés, la construcción, que comenzó en 1922, se inspiró directamente en la Escuela de Chicago, pionera en la construcción de grandes alturas con estructuras de acero.
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| Celebración de los 100 años del Banco Pastor con el rojo de su poseedor. Foto de La Opinión Coruña. |
Características Clave de su Legado: (El Banco Pastor a lo largo del tiempo (La Voz de Galicia)).
El Primer ‘Rascacielos’: Con sus 38 metros de altura, el edificio se erigió como la estructura más alta de España de su tipología hasta finales de la década, ganándose el apodo popular de "el rascacielos" en la prensa de la época y obligando a los coruñeses a, literalmente, "mirar hacia arriba".
Innovación Estructural: Fue una obra maestra de la ingeniería moderna, destacando por su innovador uso del hormigón armado y, según recientes investigaciones, el empleo de pozos de cimentación al estilo caisson de Chicago, desterrando el mito popular de los pilotes de madera que supuestamente crujían por la noche.
Eclecticismo y Elegancia: Su estilo es una mezcla de modernidad y tradición, combinando la funcionalidad de la arquitectura de negocios con detalles ornamentales del Neobarroco y el Art Déco, lo que le otorga una gran presencia y monumentalidad en su estratégico chaflán entre Cantón Pequeño y la Calle de Santa Catalina.
Un Símbolo que Trasciende a la Banca
El edificio fue la sede central del Banco Pastor hasta su absorción por parte de Banco Popular y, posteriormente, Banco Santander. Actualmente, la propiedad es de la Fundación Barrié, y aunque la banca sigue ocupando sus espacios, el inmueble se ha consolidado como un icono patrimonial innegable.
Tras un reciente proyecto de recuperación, el edificio reabrió sus puertas en 2022, devolviendo actividad a sus históricos salones interiores, iluminados por un impresionante vestíbulo de doble altura coronado por una gran vidriera.
La iluminación de este fin de semana, que se extenderá durante toda la semana, no solo celebra los cien años del inmueble, sino que subraya su importancia como un faro de luz y de historia en el corazón urbano de A Coruña, recordando a todos que un siglo después, el coloso de piedra sigue tan vivo y relevante como el día que abrió sus puertas.
La Larga Trayectoria y el Adiós de la Entidad Pastor
La celebración del centenario del edificio contrasta con el reciente y definitivo adiós del Banco Pastor como entidad independiente, culminando una historia financiera que se remonta al siglo XVIII.
El Origen: Desde Casa de Banca hasta el Coloso Gallego (1776-2011)
La historia del Banco Pastor es una de las más longevas del sector financiero español. Sus raíces se encuentran en 1776, cuando el comerciante catalán Jaime Dalmau fundó una oficina de crédito en A Coruña. Sin embargo, el apellido clave llegó en 1877, cuando José Pastor Horta se convirtió en socio de la entidad, que pasó a denominarse Casa de Banca Pastor.
La gran consolidación llegó bajo la dirección de Pedro Barrié de la Maza (Conde de Fenosa), quien impulsó el banco hasta convertirlo en un pilar de la economía gallega y una de las entidades más importantes del país, con una fuerte vinculación al sector industrial y pesquero.
1925: El banco inaugura su sede central en Los Cantones, el edificio que ahora celebra su centenario.
Liderazgo Femenino: Tras la muerte de Barrié, su esposa, Carmela Arias y Díaz de Rábago (Condesa de Fenosa), asumió la presidencia en 1971, convirtiéndose en la primera mujer presidenta de un banco en España.
El Final de la Independencia: La Cadena de Absorciones
La crisis financiera de principios del siglo XXI marcó el inicio del fin para la centenaria entidad koruñesa.
Absorción por Banco Popular (2012): En 2011, en el marco de la reestructuración bancaria en España, el Banco Pastor acordó su fusión por absorción con el Banco Popular Español por 1.365 millones de euros. Aunque se mantuvo inicialmente como una filial con ficha bancaria propia y cierta autonomía en Galicia, el Pastor perdió su independencia estratégica y operativa. La sede social fue trasladada de Koruña a Madrid, un duro golpe simbólico para la ciudad.
Llegada al Grupo Santander (2017): El destino del Pastor quedó irrevocablemente ligado al de su comprador. En junio de 2017, tras ser declarado "inviable" por las autoridades europeas, el Banco Popular fue comprado por el Banco Santander por el
precio simbólico de un euro.Desaparición Definitiva (2018-2019): Este movimiento desencadenó la absorción final del Pastor. El proceso se formalizó legalmente en septiembre de 2018, cuando se completó la fusión por absorción de Banco Pastor y Banco Popular por parte del Banco Santander. La marca Banco Pastor y su ficha bancaria desaparecieron definitivamente tras 242 años de historia. La integración tecnológica y comercial, que supuso el reemplazo de la enseña Pastor por la de Santander en todas sus oficinas, culminó en marzo de 2019.
Así, aunque la entidad financiera que le dio nombre ya no existe, el majestuoso edificio de Koruña se alza como el último y más visible testamento de la tradición financiera gallega que el Banco Pastor representó durante más de dos siglos.
Un Contexto de Despedida: El Fin de la Banca Gallega
El destino final del Banco Pastor no fue un hecho aislado, sino un capítulo más en el cambio tectónico que sufrió el sistema financiero de Galicia a raíz de la crisis inmobiliaria y crediticia de 2008.
La comunidad autónoma, que durante décadas se enorgulleció de tener dos grandes cajas de ahorro y el Banco Pastor como pilares financieros propios, vio cómo su mapa bancario se desmantelaba por completo en un proceso vertiginoso:
La Desaparición de las Cajas: De Caixa Galicia y Caixanova a Abanca
El trauma financiero más significativo fue la desaparición de las históricas Cajas de Ahorro Gallegas, entes fundamentales para el desarrollo social y económico de sus territorios:
La Fusión Impuesta (2010): A instancias de la Xunta de Galicia y el Banco de España, y buscando crear una entidad con capacidad de supervivencia, se forzó la fusión de Caixa Galicia (con sede en Koruña) y Caixanova (con sede en Vigo) para dar lugar a NovaCaixaGalicia (NCG).
El Rescate y la Nacionalización: A pesar de la fusión, la nueva entidad, lastrada por activos tóxicos, necesitó inyecciones masivas de capital público (más de 8.000 millones de euros), lo que llevó a su nacionalización a través del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB).
La Venta y el Nacimiento de ABANCA (2013): En diciembre de 2013, la entidad resultante (ya como NCG Banco) fue privatizada y vendida al grupo venezolano Banesco, que la rebautizó como ABANCA. Este proceso marcó la desaparición definitiva de las cajas de ahorro gallegas como instituciones con vocación social y su conversión en un banco comercial privado, poniendo fin a una tradición de más de un siglo.
La Unificación de Destinos
El cierre del ciclo con la absorción del Banco Pastor por parte de Banco Santander en 2017 consolidó la transformación:
Pérdida de Sedes: Koruña perdió las sedes centrales de sus dos grandes instituciones financieras, el Pastor y Caixa Galicia, trasladadas o absorbidas por grupos foráneos.
Centralización: El poder de decisión financiera se desplazó a Madrid o fuera de España, dejando a la comunidad con ABANCA como única gran entidad con centro de poder en Galicia, aunque con capital venezolano.
Un Contexto de Despedida: El Fin de la Banca Gallega y la Indignación Social
El destino final del Banco Pastor no fue un hecho aislado, sino la culminación de un cambio tectónico en el sistema financiero de Galicia, acelerado por la crisis crediticia. La comunidad autónoma perdió sus pilares financieros propios en un proceso vertiginoso: las dos grandes cajas de ahorro y el Banco Pastor.
La Desaparición de las Cajas: El Coste Social
El trauma financiero más significativo fue la desaparición de las históricas Cajas Gallegas. La fusión forzada de Caixa Galicia y Caixanova dio lugar a NovaCaixaGalicia (NCG). Esta entidad, lastrada por activos tóxicos, tuvo que ser rescatada con más de 8.000 millones de euros de dinero público antes de ser vendida a capital privado (Banesco, que la rebautizó como ABANCA).
La pérdida de las cajas no solo supuso la centralización del poder de decisión fuera de Galicia, sino que dejó un amargo sabor a injusticia por el coste social y económico de la gestión.
La Gran Indignación: Jubilaciones y Riqueza a Coste Público
Mientras miles de pequeños ahorradores y preferentistas perdían parte de sus inversiones y la sociedad gallega asumía el rescate, la gestión de la crisis de las cajas quedó marcada por el escándalo de las indemnizaciones y jubilaciones millonarias de sus directivos.
Varios altos ejecutivos de las antiguas cajas se retiraron con pensiones vitalicias y cuantiosas indemnizaciones, a pesar de la ruinosa gestión que llevó a la quiebra y el rescate de las entidades. Estas elevadas sumas (que en algunos casos superaron los 7 u 8 millones de euros) se percibieron como un saqueo ético e incluso fueron objeto de investigación judicial.
El cierre del ciclo con la absorción del Banco Pastor por Santander consolidó la pérdida definitiva del centro de decisión financiera en la región.
Un Contexto de Despedida: El Saqueo de la Banca Gallega y la Factura Judicial
El destino del Banco Pastor y, sobre todo, el de las Cajas Gallegas, se convirtió en un símbolo de la corrupción financiera pos-crisis en España. El colapso dejó un doloroso legado de descapitalización, deuda pública y desconfianza.
La indignación: Juicios y Devolución de Pensiones Millonarias
El escándalo social más explosivo fueron las prejubilaciones y rentas vitalicias millonarias que se auto-otorgaron varios altos directivos de las cajas justo antes de su colapso, a sabiendas de la delicada situación.
José Luis Pego, Gregorio Gorriarán y otros ejecutivos, procedentes de Caixanova, se atribuyeron sumas que en total superaron los 19 millones de euros en concepto de prejubilación.
Sentencia y Devolución: El Tribunal Supremo confirmó la sentencia contra estos exdirectivos por delitos de administración desleal y apropiación indebida. El fallo judicial de 2018 obligó a José Luis Pego y Gregorio Gorriarán, en particular, a devolver 10,43 millones de euros a la entidad, al considerar que se blindaron con contratos de altísima remuneración mediante engaño y en plena crisis bancaria. Además, algunos de los directivos cumplieron pena de prisión.
La Corrupción Política
El proceso de fusión también estuvo marcado por la controversia política, con acusaciones de oscurantismo y de un proceso impulsado por la Xunta de Galicia que, a pesar de las promesas de crear una "entidad gallega y solvente", terminó en la pérdida total de la soberanía financiera. Un ejemplo es la Comisión de Investigación abierta en el Parlamento de Galicia a comienzos de 2013, que fue repetidamente paralizada y no logró emitir un dictamen final durante años.
En definitiva, la iluminación festiva del Edificio del Banco Pastor es una celebración del patrimonio, pero se erige también como un mudo testigo de cómo la corrupción directiva y la crisis sistémica borraron de un plumazo dos siglos de tradición bancaria gallega, dejando tras de sí una factura millonaria y un profundo sentimiento de injusticia social.
La Centralización Financiera en España
El final de la banca gallega es un espejo del proceso de centralización financiera que transformó el mapa bancario español. La desaparición de las entidades regionales, sumada a la escasa resistencia de los centros de decisión en otras comunidades (como Cataluña tras la crisis política de 2017), concentró el poder de decisión del crédito y el ahorro en las grandes sedes de Madrid.
Este desplazamiento regional de las finanzas ha generado un constante debate sobre el desequilibrio territorial, ya que la gestión del capital que antes se decidía en Koruña o Vigo, y que conocía de cerca las necesidades de la economía gallega, ahora se gestiona desde despachos lejanos.
La iluminación festiva en el Edificio del Banco Pastor, que ahora cumple su centenario, es, por tanto, una celebración del patrimonio arquitectónico y la memoria histórica, pero también un recordatorio melancólico y crítico de una época en la que la irresponsabilidad directiva y la factura de la crisis financiera borraron de un plumazo dos siglos de tradición bancaria gallega, a costa del contribuyente.
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