La situación de Yeremay Hernández se ha convertido en el principal foco de la actualidad deportiva en Koruña. Mientras el Sporting de Lisboa prepara una "nueva ofensiva" económica para el mercado de invierno, la joya de la cantera blanquiazul ha querido zanjar la especulación con una declaración de amor incondicional al Deportivo de La Coruña.
La Nueva Ofensiva Lisboeta: 40 Millones a la Vista
Desde el verano pasado los portugueses del Sporting llevan suspirando por Yeremay Hernández, el extremo más eléctrico que ha salido de Abegondo en años. Ya en agosto tantearon al Dépor con una oferta seria —se habló de 25 a 30 millones más variables—, pero en Riazor respondieron con la calma de quien sabe lo que tiene: Yeremay no se toca.
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| Yeremay ha sido portada de periódicos portugueses por el interés del Sporting en ficharlo. |
Los informes desde Portugal indican que el Sporting Clube de Portugal no ha renunciado al fichaje del talentoso extremo. Tras el rechazo a la primera oferta, la dirección deportiva lusa tiene a Yeremay como prioridad absoluta para reforzar la plantilla en enero.
La nueva estrategia pasa por acercarse peligrosamente a la cláusula de rescisión, que el Dépor blindó en junio de 2025 al renovar al jugador hasta 2030, fijándola en 40 millones de euros. El club portugués parece dispuesto a realizar una inversión récord, asumiendo que el Deportivo no se sentará a negociar una cifra inferior, ya que Yeremay es considerado la pieza fundamental para lograr el ascenso a Primera División.
El Jugador Sentencia: "Mi continuidad está dada por hecha"
Frente al ruido de las cifras millonarias y el interés de un club de Champions League como el Sporting, Yeremay Hernández ha adoptado una postura firme y clara, priorizando su corazón y su compromiso con el Deportivo.
Tras ser galardonado como el mejor futbolista de Segunda División en la reciente gala de la AFE, el jugador sentenció públicamente que su futuro está en A Coruña:
"Mi continuidad en el Dépor está dada por hecha. Soy del Deportivo y es el club que amo, el club de mi vida. Le pido a la afición tranquilidad porque aquí me quiero quedar."
Estas declaraciones actúan como un dique de contención frente a la presión exterior. El mensaje de Yeremay es claro: el Dépor es su prioridad, independientemente de las cifras que se manejen en Portugal. Su objetivo actual es culminar el proyecto de ascenso y seguir creciendo en el club que le dio la oportunidad.
El Dépor se Remite a la Cláusula
La postura del jugador simplifica, pero no elimina, la difícil tarea de la directiva deportivista. El club se remite a los 40 millones de euros de la cláusula y no contempla negociar a la baja, ni siquiera ante una oferta superior a los 30 millones.
La declaración de Yeremay refuerza la posición negociadora del Dépor, ya que indica que el factor más importante —la voluntad del futbolista— está de su lado. El futuro de Yeremay pasa por un escenario de 'todo o nada': o el Sporting de Lisboa paga íntegramente (o casi) los 40 millones, o el jugador permanecerá en Riazor para luchar por el ansiado ascenso.
Desde dentro, el mensaje es claro. Fernando Soriano, el director deportivo, lo dijo sin rodeos: Yeremay es “una pieza fundamental del proyecto”.
Mientras tanto, la afición del Dépor, que ya ha visto demasiadas promesas marcharse por cuatro duros, suspira de alivio cada vez que Yeremay pisa el césped. Y en Koruña, más de uno imagina la escena: un avión del Sporting esperando en Alvedro y Yeremay diciendo desde la ventanilla... “non, que eu quedo”.
El mercado de invierno se presenta como una prueba de fuego para la dirección del Deportivo, que deberá gestionar la presión económica de un traspaso récord con la promesa de fidelidad de su joven estrella.
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